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Aurora Cervantes Casares (Ecuador)


Aurora, la poeta del amor. Sus versos nos invitan a cerrar los ojos, apretarnos los labios. En sus letras encontramos un regalo que viene acompañado de la frescura sonrosada, que solamente da la caricia del viento de los páramos. En sus textos su voz nos llama, y el silencio se vuelve chocolate cuando hemos sido los elegidos de presenciar el milagro de sus palabras, conmoviendo a placer nuestros cuerpos ávidos de lectura.

Quería
Quería ser poeta del amor,
del paisaje, 
de la luna,
de la noche,
del amanecer.
Me repugnaban,
me irritaban los tristes,
los amargados que decían
NO a todo.
Quería ser poeta y...
se me atoraban los sueños.
Las palabras se quedaban mudas,
el lápiz quieto. 
Solamente una sonrisa de idiota
queda ahora floreciendo en mi cara
vieja,
de poeta.

Me gustas
.......me gusta oír
lo que cuentas
en silencio.
Me gusta oír lo que callas,
me gusta oírte sollozar,
me gusta verte
caminar,
correr,
reír,
cantar. 
Definitivamente !Me gustas!

Te traigo un regalo
Te traigo de regalo
una estrella para tu cielo.
Cielo!
Aquel que guardas
escondido y que nadie conoce.
Aquel al que subes
solamente, cuando
sin lágrimas lloras.
Aquel en que
silenciosa, cantas.
Aquel, al que suplicante
de perdón llegas.
Estrella pequeñita blanca
puntito de luz
para que sólo
tú la veas.

Quieta
Inventando tu presencia
para mí.
Oyendo tu voz
llamándome.
Inventando tu sonrisa
para mí.
Quieta,
permanezco estática
sin respiro siquiera
y, a pesar mío
te esfumas,
dejando solamente
mis ojos cerrados,
mis labios apretados
y,
tu ausencia
en mi dolor.

El elegido
Siempre amé
a Jesús.
Aprendí a amar
a Judas.
El elegido para ser maldecido
De quien aprendí más?
Que sé yo.

El segundo baile
La Manuela está linda. Tiene la frescura sonrosada, que solamente da la caricia del viento de los páramos. Con la piel color de chocolate claro. Con la sonriente cara, enmarcada por el negro pelo, abrillantado, por el siempre pasar de la mano mojada en el agua fría de la acequia transparente.

"Como murmulla el río,
como ríe la montaña.
El suave canto del mirlo
tiernamente le acompañan"

Paso por allí el amor y cubrió de besos, el cuerpo virgen de la Manuela.
No es mas una niña. La hierba verde floreció con su sangre derramada.

"Como murmura el río,
como gime la montaña.
El suave canto del mirlo,
dulcemente le acompañan"

Cuanto miedo esconde! Si supieran su verdad. Se palpa el vientre con las dos
manos.
Esta llenito, redondo apenas.
Si es una vida la que guarda dentro suyo.
Le llena la ilusión el alma y ya nada mas le importa.
Será lindo?
Cuando llegará?
Quisiera ver el color de los trigales en su pelo. El cielo en sus ojos.

"Como solloza el río,
como llora la montaña.
El suave canto del mirlo,
suavemente le acompañan"

Es la Noche Buena. Algo extraño le sucede. No es un dolor, es un milagro lo que conmueve su cuerpo. No sabe si avisarle a la mamá. Se queja despacito, despacito.
Pero... allí esta la madre siempre alerta. Despierta a su marido y con él se llevan a la Manuela, atravesando por el chaquiñan y cruzando el llano.
Van en busca del médico. Un joven, casi un niño que está haciendo la rural en el pueblo.
Se quieren apurar, pero no pueden. Corre el padre... la madre queda junto a la niña, esperando en la mitad del potrero.
-Que regresen pronto!
Por fin llegan sudorosos y fríos.

Prende el padre una chamiza.
A lo lejos cantan los gallos.
La media noche se ha ido. No esta ya... clareando el cielo, se asoma el día.
Todos serenos, callados, sin saberlo, rezan.
De pronto, un llanto que se hace fuerte, hace latir duro golpeteando el pecho, el corazón del médico arrodillado, del padre en cunclillas, de la madre de pie.
La niña con la frente iluminada.
-Es varón! Le llamaran Manuel.
El milagro se hizo realidad... tiene la piel de chocolate claro y... el cielo en sus ojos, solamente, que cuando es de noche y brillan encantadas las estrellas.

"Como susurra el río,
como arrulla la montaña.
El dulce trino del mirlo,
ahora entona una nana!

Biografía
Aurora Cervantes Casares, una mujer notable, podía haber nacido cualquier día de cualquier año de cualquier siglo, de cualquier milenio. Es un ser sin tiempo. Y aún hoy, en sus actuales y cronológicos sin número de años, sigue en crecimiento.

Comentarios

  1. Maravilloso!!! No solo despierta mi alma que a veces siento se encuentra en lontonanza, también despiertan mis sentidos y las ganas inmensas de seguir viviendo y de seguir leyendo las profundas palabras de mi escritora favorita, mi Aurorita!!!

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. mi despertar al asombro de cada dia es mi vida. Ahora eres tu otro Loquito mas, mi nuevo amigo el que pone alas a mis sueños

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