La poesía de Marialuz anuncia un encuentro. Sus versos acarician la gruta en que vivimos y todo lo bueno se despierta. La poeta Albuja tiene esa fuerza de las olas que derrumban la rabia innecesaria hasta convertir ese vacío en locura. Tal vez por eso aún el tiempo no se ha ido. Estos placeres de la carne Sus movimientos en la orilla que no sabe dónde el fin dónde el destrozo. Amamantarlo sin ninguna pretensión. Vagabundear condescender besar el barro. Hace ya mucho que no era tan humana. Y ahora que lo veo tan divina. Me miro y no me reconozco Algo de bueno se despierta sin que yo lo haya buscado el aire el sol la tierra los gusanos todos los todos de la luz sus claroscuros el aire el sol la tierra los gusanos. Romper el vaso contra un muro. para ahogar a las hormigas que buscaban alimento y se toparon con mi rabia en la baldosa. Regar el jardín por si...
Espacio de publicaciones culturales donde la palabra del otro se transforma en poesía. Aquí mostramos el arte de poetas locales e internacionales. El poema abraza con fuerza y nos inspira a recorrer ese hermoso camino de la literatura desde Ecuador hacia el mundo.