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Lorena Otálvaro (Colombia)


En la poesía de Lorena destilan las emociones.  Sus versos son hojas de árboles que besan los pensamientos. Otálvaro nos espera en el camino de lo desconocido, donde encontraremos la magia que se escapa de todo. La poeta y la ilusión de su alma nos hace esclavos de la libertad, esa que nos muestra en medio de páginas donde las mariposas danzan entre puntos suspensivos y el silencio del bosque.
 

Poemas tomados del  poemario ÓPALO DE LUNA


Te espero
En el silencio del bosque
Donde las mariposas azules danzan
al compás de las miradas.
Donde mis sueños se posan en el vuelo de las hadas
y las hojas de los árboles besan mis pensamientos.
En el misterio de la noche  que ríe a carcajadas
cuando tú presencia impregna mis pupilas.
Te  espero, en el camino de lo desconocido
en el alfa de mis pasiones y  el omega de mis suspiros.
En lo más sensible de lo abstracto y en el canto de mis labios,
en el musgo de la inocencia y el refugio de la melancolía
mientras juega el viento con mi piel y mis manos ansían las tuyas.
Te espero donde comienza el aroma del cielo y el vacío de mis miedos.
Y donde la mariposa violeta juega entre los papiros de mis deseos.


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Y seguí viendo en sus pupilas mariposas de mi jardín
instalando la ilusión a mi alma
atrapada en un sueño , palpando su sonrisa
y besando su boca de marfil.
Hoy apuesto a esta mujer que soy
para desnudar mi ser en la coyuntura de sus brazos
y mirar el cristal de sus sentimientos
que son nobles y blancos como el color que no tiene color.
He amado su presencia desde antes
y soñado con su voz que teje las orillas de mi soledad.
Libertad es lo que hallo en este camino donde la distancia nos agrede,
sin embargo cada día lo siento más cerca
porque el brillo de mis ojos ahora llevan su nombre.


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Embrujo
En él está la magia, esa que escapa de todo
Me sumerjo en el embrujo de su mirada
Haciéndome esclava de lo que él es
Pasa de una manera simple
Para satisfacer mis pupilas
No existe tiempo en la alta gama de su presencia
Me miro en él, lo conozco en mí.


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He aquí mi sombra que se dibuja bajo el atardecer de su piel. 
Atribuyo mi silencio a  esta gama de sabores perdidos en la ausencia de su alma,
la misma que mis manos entretejían con los sonidos enmudecidos de vientos.
Se mitiga un nosotros  bajo el cielo azul que se pierde en el reflejo de este río que he de remar tan fuerte para hallar el beso perdido de su boca y despojarme de mi timidez  que se esconde en la sonrisa de sus pupilas.
Este corazón atribulado, mal gastado, de tiempos pasados, renace en la presencia de su existencia, que me acompaña en este ir y venir de los cedros rojos y oropéndolas.
Destilan las emociones para encontrarme con el arcoíris de su esencia, puedo extraviarme en este silencio infinito, de sus pestañas que navegan en la intemperie de cada uno de mis gestos.
¿Dónde hallar el paraje de su vida?
Para entender que  las estrellas nadan al compás de mis labios y  que el recuerdo se esparce en el horizonte de un adiós que no tiene final.


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Y aquí sigo…
En medio de páginas muertas
Segundos fragmentados
Ebria de tristeza
Escudando miedos
Enjaulada entre puntos suspensivos.

Biografía

Lorena Otálvaro es gestora cultural, escritora y apasionada por la poesía.
Nació en Medellín, Colombia.
Tiene su propia página en Facebook  titulada “Deletreando el amor” donde publica varios de sus escritos.
Pertenece a la fundación Rinconesarte internacional.
Fue representante de literatura en la ASOCIACIÓN DE ARTISTAS UNIDOS DE COLOMBIA (AUCO)
Se desempeñó  como codirectora del colectivo Artistas ATENEA de Medellín y fue directora de literatura de dicho colectivo artístico por dos años.
Algunos de sus escritos han sido publicados en antologías nacionales e internacionales, como también en revistas colombianas.
Ha participado en eventos poéticos y programas de radio de índole nacional e internacional.
Es la autora de algunos spot de la emisora  el cantar de las libélulas de México.
Ha realizado talleres con niños y jóvenes con problemas de conducta.
Se ha desempeñado como presentadora.
Fue galardonada con la espiga dorada en Tembladera, Perú por su desempeño como escritora y poeta.

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